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Red Nacional de Entrenamiento

Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos Rio 2016 reflejan el legado deportivo por todo el país

Brasil ganó el derecho de ser sede de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2016 hace cinco años, en Copenhague (Dinamarca), en octubre de 2009. En esa oportunidad, Río de Janeiro entró en la disputa para albergar el gran evento multideportivo junto a fuertes competidores como Chicago (EUA), Tokio (Japón) y Madrid (España). Desde la victoria brasilera, una de las más grandes metas del país es garantizar que los beneficios y el legado de los Juegos no se restrinjan a la capital fluminense.

Así, se han ido construyendo distintos centros de entrenamiento en todo el país. Por medo de la Red Nacional de Entrenamiento (ley federal nº 12.395, de marzo de 2011), las obras propician condiciones adicionales de preparación a los atletas brasileros que competirán en los Juegos de 2016. Más que eso: ellas posibilitan el desarrollo de distintas modalidades por parte de Brasil y la formación de nuevos talentos para las futuras ediciones olímpicas.

El objetivo del programa es también intercomunicar las instalaciones ya existentes – como las arenas construidas para los Juegos Panamericanos de 2007 – a las nuevas obras, de manera de reestructurar y renovar la infraestructura del deporte brasilero, tanto para las modalidades olímpicas como para las paralímpicas. En Río de Janeiro, los equipamientos formarán el Centro Olímpico de Entrenamiento (COT), en la Barra da Tijuca y en Deodoro, de los de las regiones que recibirán pruebas en 2016. Además, por medio de la Red Nacional, es posible realizar el perfeccionamiento técnico para entrenadores, árbitros y gestores, entre otros profesionales.

Los Centros de Iniciación al Deporte (CIE) configuran otro pilar del programa. En total, serán 254 obras, en 240 municipios, con una estructura para la práctica de hasta 13 modalidades olímpicas, seis paralímpicas y una no olímpica. La inversión total es de R$ 910 millones, por medio del PAC 2. Tres CIE, por ejemplo, tuvieron las firmas del contrato de transferencia concretizadas en el último mes de junio, en Piauí, para instalaciones en los municipios de Teresina, Picos y Paraíba.

Legado

Para el secretario de Alto Rendimiento del Ministerio de Deporte, Ricardo Leyser, el legado de los Juegos Rio 2016 ya es perceptible antes del inicio de la competencia. “Estamos construyendo un legado en todo el país, y con ello vamos a nacionalizar el beneficio de los Juegos”, destaca. “Esa nacionalización va a tener un impacto muy grande en la democratización del deporte, porque las personas tendrán acceso a condiciones adecuadas para la práctica deportiva y esto va a disminuir la desigualdad entre las regiones brasileras”, destaca el secretario.

Otro factor destacado por Leyser es la amplitud alcanzada por el legado olímpico. “Esas acciones están difundidas en proyectos que van desde el deporte de base hasta el altísimo rendimiento. Ellas van desde las 44 mil escuelas involucradas en competencias a nivel escolar, pasan por los Centros de Iniciación al Deporte, incluyen las decenas de pistas de atletismo que están siendo recuperadas o construidas, y pasan también por los centros dedicados al alto rendimiento, como el Centro de Formación Olímpica (CFO), en Fortaleza; el Centro Panamericano de Judo, en Lauro de Freitas, en Bahía; y el Centro de Balonmano, en San Bernardo (SP), entre otros”, detalla.

A todo esto, se suma el desarrollo del deporte nacional en términos de equipamiento. “Nuestro legado olímpico pasa, además, por los millones de ítems de equipamientos se están entregando a distintas modalidades como judo, lucha olímpica, esgrima y taekwondo, entre otras”, completa.

Una síntesis de algunas de las principales instalaciones distribuidas por el país y que ya integran la Red Nacional de Entrenamiento: